Había visto el graffiti hacía tiempo pasando en coche por detrás de la calle del Instituto, pero o bien iba con prisa como para pararme, o bien había poca luz para poder sacar la foto. Así que fueron pasando las semanas, y poco a poco vi como al graffiti original se le iban añadiendo otras pintadas, que si en un principio parecía que lo estaban destruyendo y desvirtuando, le fueron dando si cabe más significado.
Con su dibujo el autor denunciaba la deriva en la que ha entrado la educación en nuestro país. Y que mejor lugar para expresarlo que en el muro de un instituto. Bajo el título "La educación dentro de siete años", un soldado tiroteaba a dos libros que intentaban escapar, impulsados por sus alas, de la que parecía ser una muerte segura.
Y como si se tratase de una representación de la realidad, a la obra original se le sumaron otras intervenciones que, por el modo en que se expresaban, parecían intentar despreciar al original: el autor de "Yo no fui ...." se eximía de cualquier responsabilidad; quien escribió "Show" prefería emplear la descalificación en lugar de debatir sobre el problema; "Espi y Soto" iban a lo suyo; otros ni se molestaban en dejarse entender; hubo alguien que se atrevió a tirotear al propio soldado; el último escenificó el fin derramando un poco de sangre de uno de los libros.
Semanas después de haberlo visto por primera vez, y sobre aquel muro, se había escenificado algo más que la deriva de la educación.
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