HISTORIAS. Plane.

Estos días hemos tenido que estar en casa más de lo que para nosotros es habitual. Sin embargo ha sido una buena oportunidad para terminar varios proyectos que llevaba tiempo sin finalizar, así como para empezar otros que casi tenía olvidados.

Entre los olvidados se encontraba éste: intentar hacerme un plane. He de reconocer que el impulso me lo dio la entrada leída en la Oficina de Hechos, aunque la tabla llevaba desde hacia unos meses en casa. La encontré en la playa, y por su tamaño, en el momento en que la vi, ya pensé en darle este fin. Seguramente no sea de la madera adecuada, pero para probar no está mal. Siempre había querido además hacerme mi propia tabla, y aunque ésta sea a escala, y con unas proporciones diferentes, supone cumplir el sueño de algún modo.

Por delante me quedan varias horas de cepillo para reducir con paciencia un poco el grosor y suavizarle los cantos. Tras los acabados vendrá la prueba, espero que en pocas semanas.