HISTORIAS. Nueva arena para las dunas.

Llevo varios días viendo las olas desde la ventana. Hoy, con el mar más ordenado, he podido ver alguna que otra buena, aunque sin nadie sobre ella. ¿Serían realmente surfeables esas paredes?. Un poco como James Stewart en "La ventana indiscreta", y desde la sala, saqué alguna foto. Después de verlas en el ordenador, me di cuenta de nuevo de una cosa en la que me había fijado hace unos días: tras el paso de Kurt, las dunas estaban cubiertas de arena. No es nada común, y solo recuerdo haberlo visto antes en dos ocasiones, una de ellas tras Klauss en 2009.

El domingo me acerqué hasta la orilla para ver cómo estaba la playa, y comprobé que apenas se había llevado arena de la zona de carrera de marea. Es más, parecía que el viento, que había soplado con especial fuerza durante cuatro días desde el mar, la había acumulado contra la base de la duna. Viendo toda la que había en la parte de atrás, mi conclusión fue que la que no había cabido en la playa, estaba ahora acumulada sobre las dunas. Escarbé un poco y efectivamente la vegetación estaba allí, a varios centímetros, como si en lugar de arena aquello fuese nieve que hubiese caído cubriendo un campo. Fue entonces cuando me vino a la mente un comentario que Carlos Bremón me hizo sobre una foto que había publicado en el blog hace ahora un año. En aquella foto, tomada en 1930, las dunas aparecían en Doniños sin apenas vegetación. Para remarcar si cabe aún más lo sorprendente de aquella imagen, Carlos me enviaba otra foto de Pantín, más o menos de la misma época, en la que el espacio dunar aparecía prácticamente igual, como una gran superficie blanca (las fotos eran en blanco y negro), sin apenas vegetación. ¿Qué había ocurrido? En aquel momento nos felicitamos por el buen estado que ambos espacios dunares parecían tener hoy, sobre todo si lo comparábamos con aquellas imágenes de hacia ochenta y seis años. Lo que no recuerdo es si finalmente concluimos que el paso de un gran temporal debía de ser la explicación de aquellas dunas sin vegetación. Si realmente fuese así, el de 1930 debió de ser uno de los buenos. He buscado por internet, y he encontrado que precisamente en ese año hubo un temporal que se recuerda como histórico, aunque no he encontrado mayores datos, salvo que en San Sebastián inundó la parte vieja de la ciudad. 

Me imagino que en unas semanas la vegetación se alzará de nuevo sobre la capa de arena que ahora la cubre. Nuevos metros cúbicos de árido para las dunas, que en este caso el temporal, al contrario de lo que había ocurrido con Hércules, le ha traído. Esperemos que sirva para reforzarlas.